El presidente ruso, Vladimir Putin, recibió personalmente este jueves en el aeropuerto de Vnúkovo-2 a los ocho presos liberados en el mayor intercambio con Occidente desde 1985.

Entre los liberados se encuentran el periodista español Pablo González y los espías Anna Valereva Dulceva y Artem Viktorovic Dulcev, quienes fueron descubiertos en Eslovenia antes del canje. La pareja, que vivió en Argentina y tuvo dos hijos como parte de una estrategia del servicio secreto ruso, fue saludada con calidez por Putin, quien les entregó grandes ramos de flores y expresó su gratitud por su lealtad.

El intercambio de prisioneros incluyó a Vadim Krásikov, condenado a cadena perpetua en Alemania por el asesinato de un ciudadano georgiano. Putin, en un acto de bienvenida, abrazó a los liberados y les prometió medallas estatales, mientras los medios de comunicación rusos recibieron instrucciones de restar importancia al evento. El presidente ruso también se reunió con los presos en un acto privado en el aeropuerto, donde les agradeció por su compromiso con el país.

El canje involucró a 15 rusos y extranjeros liberados por Rusia a cambio de ocho prisioneros encarcelados en países de la OTAN, incluido un ciudadano alemán condenado a muerte en Bielorrusia. Además de los espías y el periodista, los otros liberados son Mijaíl Mikushin, condenado en Noruega; el hacker Román Selezniov, sentenciado en EE.UU.; Vladislav Kliushin, condenado en EE.UU. por delitos informáticos; y Vadim Konoschenok, extraditado desde Estonia a EE.UU. por compra de equipamiento militar.

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